Photo Credit: Paul Hewson
Este fue un día interesante, intercalado entre las ráfagas de tormenta Éowyn vio muy poco viento, pero algunas grandes marejadas de baja frecuencia. Mi API meteorológica indicaba 2 m; era difícil creer que fuera tan grande. Sin embargo, era de baja frecuencia y no me alejé lo suficiente de nadie como para «calibrar» mi decisión al respecto. De hecho, conseguimos remar a través del sonido fuera del rompeolas.
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Hicimos un poco de rock hopping en la costa este del estrecho antes de cruzar. En lugar de preguntarnos si queríamos remar desde el rompeolas, Adam nos pidió que calificáramos nuestros niveles de comodidad de 0 a 5, y nos señaló la posibilidad de escondernos al final si lo necesitábamos. Después nos acercamos a Penlee Point porque estaba relativamente bien protegida en el lado oeste del estrecho. Salté algunas rocas más y me sorprendió el oleaje, que había planeado una bonita maniobra de timón de proa, pero acabó con un feo giro con freno de mano y un montón de remadas hacia atrás. Algunos remeros fueron a echar un vistazo al gran oleaje que había a la vuelta de la esquina. Tuve que negarme porque necesitaba ir al baño. No pudimos desembarcar en la pequeña playa de Penlee Point, así que volvimos a Cawsand. Tomamos una tableta casera, compramos café en la tienda y escuchamos música de gaitas.
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La remada de vuelta fue bastante tranquila. Me resulta más difícil seguir el oleaje, y creo que hubo algún rebote desde Fort Picklecombe.
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It makes me smile, when I see it.